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Cómo nació Raya Power

Meghan y Nicole están unidas por una misma misión para democratizar la energía solar — asegurar que todas las personas, sin importar dónde vivan o si alquilan o son dueñas, puedan reducir sus facturas de luz y mantenerse resilientes ante cualquier apagón.

Han dedicado cientos de horas investigando el problema, colaborando con comunidades para entender las barreras que impiden la adopción y diseñando soluciones que realmente respondan a las necesidades de la gente.

CO-FUNDADORAS DE RAYA, NICOLE (IZQUIERDA) Y MEGHAN (DERECHA)

Meghan, frustrada por el aumento constante del costo delectricidad y la impotencia de no tener forma de reducirlo como inquilina, comenzó a explorar el mundo de la energía solar mientras completaba su MBA y su maestría en Energía Renovable en Stanford. Escuchaba a la gente hablar de lo accesible que se había vuelto, pero seguía pareciendo inalcanzable — nadie que ella conocía la tenía. Mientras más aprendía, más claro veía el problema: la tecnología funcionaba, pero el sistema a su alrededor no. La energía solar se vendía como un costoso proyecto de construcción para dueños de hogar con el dinero, la estabilidad y la paciencia para enfrentar los trámites. Era una solución diseñada para unos pocos, no para la mayoría. Esa comprensión se convirtió en su motivación. Meghan decidió transformar la forma en que funciona la energía solar: hacerla simple, transparente y pensada para todos.

Mientras tanto, Nicole había vivido toda su vida el contraste entre las luces estables del continente y los apagones que definían el día a día en Puerto Rico — y el huracán María fue el momento en que esa realidad se convirtió en un llamado. Mientras trabajaba en el Rover de Marte en el Jet Propulsion Lab de la NASA, Nicole perdió contacto con su familia por dos semanas mientras la isla quedaba a oscuras — y sabía que muchas familias pasaron por algo mucho peor, algunas sin electricidad por más de un año. Esa experiencia reveló una ironía dolorosa: podíamos enviar paneles solares a Marte, pero no podíamos mantener las luces encendidas para la gente aquí en la Tierra. Esa claridad cambió su rumbo. Nicole dejó la NASA para enfocarse en el acceso a la energía más cerca de casa, y obtuvo una maestría en Diseño e Ingeniería para Impacto en Stanford, donde aprendió a co-crear con comunidades para desarrollar soluciones radicalmente asequibles, resilientes y centradas en las personas.

El destino intervino cuando Meghan y Nicole se conocieron en la boda de unos amigos — dos mujeres apasionadas por reimaginar el acceso a la energía solar. Pronto se dieron cuenta de que compartían la misma visión: la tecnología para lograr energía confiable y asequible ya existe, pero los sistemas solares simplemente no fueron diseñados para quienes más la necesitan.

Juntas decidieron cambiar eso. Y así nació Raya Pow

Raya is Different.